0

59. Engaged

Posted by Juan K Peña on viernes, mayo 29, 2009 in , , ,
Cuando leí el título yo también quise saber más y también sentí sorpresa. ‘I’m engaged’ era el título original. Lo ví en el blog de mi ‘primera novia seria’ y como me enteré por ahí está claro que el compromiso no era conmigo.

Hace unos años en Internet, Claudia llevaba un Blog. De hecho, como a ella le iba tan bien y era tan leída, a mi me dio ganas de hacer lo mismo. Modestia aparte, se me da mejor. (ouch! Jaja). Al principio lo leí porque la extrañaba. Desde que cortamos, nadie había tenido igual importancia que ella en mi vida.

Superado la etapa de echarla de menos, empecé a enfrentar una segunda etapa que era la de ‘Esta no es Claudia’. Obvio, cuando nuestra seudo-relación empezó ella era una niña que terminaba el colegio y yo era un niño de barba, universitario. Habían pasado ocho años desde la primera vez que hablamos. ¡Obvio que no iba a ser la misma! Pero el hecho concreto es que nuestros caminos se hacían divergentes. Éramos muy diferentes ahora. Es difícil que la gente cambie. Lo sé. Pero ambos habíamos experimentado cosas muy fuertes, buenas y malas, y ambos éramos personas totalmente distintas ahora. Cuando se experimentan tantas cosas, como nosotros lo hicimos, los sacudones son inevitables y se termina por cambiar. Muchos de mis sacudones se los debo a ‘la catalana’.

Ahora bien, el momento de leer ‘I’m engaged’ como titular de la entrada se vinieron muchas cosas a mi cabeza.

La nuestra fue una relación siempre complicada. Estuvimos mucho tiempo separados por el gran charco. Ella en Europa, yo en América. La situación económica por acá era para ponerse a llorar, y mi situación económica particular era para que algunos de los que lloraban se consolasen. No llegué a tener que comerme la camisa, pero me ahorraba el dinero del colectivo para poder llamarla el fin de semana. Dejaba de comer para poder mandarle algo por correo. Ella, por su parte, vivía en un buen barrio cercano a Barcelona, con una familia que sobrepasaba el millón de dólares en ingresos al año. Marruecos, Inglaterra, inclusive México eran destinos bastante comunes. Y su eterna promesa de venir, nunca se daba. No creo que haya estado engañándome, creo que sus viejos la engañaban. Pero no puso los medios que si tenía, y cuando por fin faltaban unos tres meses para vernos… un día desapareció.

Fueron días de mucha locura. Recuerdo a mi amigo, Lucho, prestándome un dólar para que hiciera una llamada para ver si estaba bien. ‘Si, estoy bien… Ya vamos a hablar pronto… te amo’. Pero no, no estaba bien… Ni íbamos a hablar. Ni me amaba. ¿Amaba? ¿Qué es eso? ¿Con qué se come? ¿Escribiste ameba? Es muy extraño el hecho que nunca pudo materializar la visita tan planeada, teniendo tanto dinero como para hacerlo… ¿Talvez no quiso?

Un 4 de noviembre, que era mi santo, recibí un email muy escueto y frío. ‘Si, estoy bien, también te he extrañado, pero no va más… Me enamoré de alguien más’. Así su mejor amigo, se convirtió en Mr. Perfect. Y yo pasé a ser ‘Pre historia’, porque Mr. Perfect, era una especie de lo que Big es para Carrie en Sex and the City (yo vendría a ser una especie de Aidan de barrio obrero en ese entonces).

Recuerdo que mi amigo Tomás fue a verme y me llevó a 'pasear' a 100 km por hora en una carretera cercana a la ciudad para ver si lograba dispersarme un poco y mi único pensamiento era cómo conseguir que vuelva a mí… ¿Por qué este recuerdo vino a mi al leer el ‘I’m Engaged’ de Claudia Bosch? Simplemente porque sabía que mi deseo, posiblemente, tenía una sola condición de caducidad: El pensar que ella, eventualmente, se iba a casar. Eso marcaría mi derrota final en la agonizante relación que habíamos llevado.

Claro, conforme el tiempo pasó, mal o bien, yo fui recuperándome de las magulladuras y heridas que quedaron. Toda relación que nos importa y termina supuestamente debe dejarnos algunas heridas. Es que los seres humanos nos reflejamos mucho en la metáfora de los erizos que se aman. Si no están juntos se mueren de frío, si están juntos con sus púas se pueden herir.

Ahora no me importaba. Ni siquiera la Claudia actual tenía que ver con aquella niña que tanto me gustaba y alguna vez quise. Pero, sin embargo, que la Claudia actual se casase tenía mucho que ver con perder a la Claudia que me gustaba para siempre. Por tanto, el shock se completó cuando observé la imagen de su mano con un pedrusco de diamantes en forma de anillo de compromiso. Era en serio. Cualquier residuo de esperanza, por más minúsculo que este hubiese sido acababa de morir en mí.

El novio, curiosamente, no era Mr. Perfect, personaje al que, por cierto, Claudia ponía a parir varias veces en su desaparecido blog, sino otro. Suponía que sería un ‘Ultra Perfect’, pero NO! ¡OH, SORPRESA! Se trataba de Lorenzo. Uno de los protagonistas del capítulo 45 de estos Caleidoscopios, que para mayor información, deleite o angustia pueden consultar en:

45. Tres versiones de una cita a ciegas:

http://juankaleidoscopios.blogspot.com/2008/12/45-tres-versiones-de-una-cita-ciegas.html
http://juankaleidoscopios.blogspot.com/2008/12/45-tres-versiones-de-una-cita-ciegas_02.html
http://juankaleidoscopios.blogspot.com/2008/12/45-tres-versiones-de-una-cita-ciegas_3840.html

A esas alturas, ya no entendía nada. ¿Qué pasó? ¿En qué momento todo lo que parecía buscar o querer en su vida, empezando por estilo, se encontraba con la decisión de casarse con este señor? ¿Qué podría esperar de él? Más allá del pedrusco con diamantes, que comprarlo es fácil: Sólo se necesita dinero.

Ojo, no es un menosprecio al amor verdadero que puedan sentir o dejar de sentir esta pareja. Eso no es algo que está en discusión. Creo que simplemente no me cuadra. Me suena al cuento de la Caperucita, terminando en una confabulación entre la Caperuza y el Lobo para matar al cazador y a la abuela, y a la abuela del cazador. O sea, es un final posible, pero no va con el desarrollo de la historia.

No he sabido nada más de ella. No me interesa saber algo más. Espero que sea feliz. Es una de las personas con las que más he hablado en mi vida y con la que más ha fluido la comunicación. Posiblemente, sea mamá a estas alturas. Hubo un tiempo, en el que intentamos ser simplemente amigos, pero no fue posible. Y no porque yo o ella sintiéramos algo más. Posiblemente, soy demasiado exigente, incluso como amigo, y ella no satisfacía mis niveles de exigencia.

Hace ratos que tomamos caminos divergentes y la tierra es redonda. El último destello de ella, posiblemente sea, el reflejo del pedrusco de diamantes en su dedo opacando el brillo de su sonrisa que siempre creí superior. ¡Molta sort, Claudia! ¡Adeu catalana!


Aquí les dejo un pequeño video, un tanto sufridor, pero válido para la ambientación de esa mala temporada que, como a tantas personas, me tocó vivir:



2

58. De aeropuertos y despedidas

Posted by Juan K Peña on martes, mayo 19, 2009
Alguna vez escuché a alguien decir que odiaba hospitales y aeropuertos, porque era los sitios donde más se despedía la gente. A mi me encantan los aeropuertos, excepto cuando hay demasiada gente reunida. O bien porque implica llanto, o bien porque implica mal olor. Tengo un olfato muy agudo. Me gustan porque implican un cambio rápido, una continua necesidad de adaptarse: Vas a otra hora, a otra altura, a otro clima, a otro idioma, a otro acento, a otro color de piel, a otra religión, a otra mentalidad, a otro aire, a otro ambiente, a dormir en otra cama, a comer otra comida, a encontrar otros amigos..

Un cambio en sí es un reto, y seguro que no todo cambio es siempre para mejor, pero no deja de ser un reto. La necesidad de adaptarse está presente en el día a día. Curiosamente, a ratos los seres humanos pretendemos adaptar nuestro ambiente y entorno a nuestra realidad, en lugar de buscar la forma de adaptarnos nosotros.

Me gustan las salas de espera de los aeropuertos. Aunque estén llenas de turistas mal vestidos, de ejecutivos con laptops y gente despeinada durmiendo en sillas incómodas o en el piso. Ofrecen mucha variedad y es difícil aburrirse. Siempre me siento lleno de ilusión de ir a algún lado, ver que sucede a mi partida y qué me recibe a mi entrada.

El pasado 12 de marzo dejé la ciudad en la que vivía. Aparte de mi familia inmediata, no había nadie más. Estaban mis abuelos, mi vieja y mi hermana pequeña. También fue un rato mi ‘primo’ Fausto, que se ha convertido en mi mano derecha para algunos asuntos. Pero a más de ellos no estuvo nadie. Me fui casi sin hacer ruido. Me di tiempo de llamar a mi maestro y decirle lo que el esperaba, y ya había oído alguna vez en su vida de parte de un amigo… ‘Maestro, soy yo… Solo llamo para despedirme, estoy en el aeropuerto’.

No hubo pancartas, ni globitos… No hubo leyendas, ni abrazos de amigos o amigas, no hubo novia llorando, no hubo mayor ruido; pero tampoco hay quejas. Las cosas se dieron de esta forma. Vine en silencio.

En casa, el abrazo más cariñoso y la despedida más dolorosa fue para mi perro. El desconocía por cuanto tiempo me iba. Sé que todavía me espera cada noche, como si fuese a escuchar mis pasos a 30 metros de casa, y empezar a ponerse contento con mi llegada. No, mi amigo, todavía eso no va a pasar… Yo también tengo muchas ganas de verte. Yo también necesito de tu fiel y desinteresada compañía. Yo también extraño las caminatas por el parque, darte de comer y ver como te convertías en el perro más fuerte e inteligente que he tenido… En el aeropuerto volví a acordarme de él. Había quedado en casa, no más triste que cuando salía a la tienda a comprar el pan.

Me gustan los derroches y no hablo de dinero. Hay un desgaste e intercambio de energías bárbaro en cada grupo de personas que llega o que sale, y en cada avión que aterriza o despega.

Pienso que me marcho con la sensación de que he hecho menos amigos de los que podría haber hecho y que no cuidé muy bien a los que tenía. Me pregunto si hay gente que se pregunta si pudo haber sido mi amiga, y no llegó a serlo… O si se preguntan, en términos de amistad, si me han cuidado o contenido lo suficiente. ¿Importa ahora la respuesta?

Escucho algunos aviones preparándose para despegar. Aún no me han llamado para embarcar. Me molesta la sensación de haber dejado demasiadas trincheras abiertas… ¿Cuántas son demasiadas? ¿Tres? ¿Dos? ¿Una?... Una ya es demasiado. No debería quedar ninguna trinchera abierta, quisiera marcharme en paz. Podría ser que no regrese nunca más. No necesariamente que muera, simplemente que no regrese. Siempre cabe esa posibilidad. No deberían quedar cosas por resolver, pero esa trinchera no la abrí yo. Duele dejar ‘enemigos’ en casa. Es más fácil dejar amigos, porque sabes que se cuidarán entre ellos… Pero no me gusta la idea de saber que dejo a las personas que amo con alguien que no me ve con buenos ojos.

Los ciclos deben cerrarse por las buenas. No se puede esperar de brazos cruzados que aquello que iniciamos termine por sí solo, muera por causas naturales o por frío. Falta valor, falta consciencia, falta consecuencia… Hay gente que cree más sabio dejar pasar. Me parece más mediocre. El tiempo sigue allí pasando, la vida sigue trayéndote los mismos problemas a los que alguna vez no te enfrentaste…. La vida es muy sabia. Evades tus problemas una, dos y hasta tres veces, pero tarde o temprano ella viene y te dice: ‘Esta es la cuenta y lo vas a pagar acumulado’. ¡Y ojo que no lo hace por hija de puta! Lo hace porque no le dejamos otra opción… Nuestra cuenta por pagar se carga de pendientes. Para crecer hay que aprender.

Es normal. El temor al dolor es demasiado grande y es un tema que ya he tocado hasta el hartazgo. Cuando uno marca el cierre de un ciclo se está haciendo un tatuaje en el alma. Así duele, así te marca y puede ser que no te quede muy bonito, pero ya está… Es imborrable, y no hay marcha atrás. Acá no hay láser que opere. Pero, la experiencia, lejos de que te gusten los tatuajes o no, es placentera porque ese día uno se recibe de adulto. No, no se vuelve adulto… Eso pasó otro momento, ahora uno es un ‘adulto maduro’. Te acabas de recibir de ‘adulto maduro’.

Y así sin más, mientras agarro mi maleta y contemplo la pantalla que anuncia el embarque de mi vuelo, pienso que en unos meses, la enemiga gratis que me gané sin el menor esfuerzo también se marchará y todo deberá volver a la normalidad, solo que no estaré para sentir esa paz. Ese ciclo no me corresponde cerrarlo, yo nunca lo abrí. Pero, también sé que esa es una tarea demasiado grande para una niña, que no es adulta, y menos madura… Pese a los errores cometidos, las acusaciones vertidas, los malos entendidos intencionales… la miro con indulgencia, porque acá no se juzga con igual rigor a los menores… Acá solo se nos juzga con mayor rigor ‘a los mejores’

Mientras camino por el túnel y asumo mi nueva realidad, visualizo que con mi salida es ella quien se va, y a quién echo de mi vida. Ya está, nena. Fuiste! Recoge tus cosas, andate, te esperan en tu casa. Acá no hay nada más para vos. Sigan participando… Gracias por venir… Buena performance, gran imitación, casi me convences… Amagaste tanto, que te terminaste amagando… No somos enemigos, porque no somos ‘iguales’. Andate, se te hace tarde, y tus heridas te están escaldando. Andate, no hay nada más que escuchar, nada más que ver, nada más que hablar. NADA MÁS…

0

57. De princesas y jaulas de oro

Posted by Juan K Peña on sábado, mayo 09, 2009

Tengo un ligero problema. Me encanta preocuparme por mujeres que no pueden corresponderme. Y no me refiero a que me traten mal, o nada por el estilo. Puede ser un poco más complicado. ¿Nunca sintieron pena por Blancanieves, o la Caperucita al ser devorada? Llamó Blancanieves a agradecer por su preocupación? ¿Mandó Cenicienta, por lo menos un e-mail diciendo: ‘hey, todo en orden, no hay drama. Me casé con el príncipe… Lamento no haberlos invitado?’ No, pero igual sufrimos.

Yo no me curé en sano. A lo mejor en muchos aspectos me gusta seguir sufriendo por princesas ajenas y esta vez me dio por preocuparme por Doña Letizia Ortiz.

Encontré hace unos días esta dirección: http://www.letizia-ortiz.blogspot.com/, un blog titulado ‘El Diario de Letizia Ortiz’. Dentro de nuestra lógica podríamos decir que hay dos posibilidades que este haya sido el Blog de Doña Letizia, o que no lo haya sido. Si no lo es, se trata de un escrito de ficción que nos permite reflexionar un poco como podrían ser los pensamientos y sensaciones de Letizia en su papel de Princesa de Asturias, esposa del Príncipe Felipe, y los cambios constantes a los que se somete al dejar de ser una persona de clase media alta o de clase alta a ser una figura de la realeza.

Quiero pensar que si es su blog. ¿Vos que vas a decidir?
Y pensando que si es su blog, mi preocupación no varía. Habrán muchas ventajas, pero en este blog se empezó a notar algo muy real que una persona común notaría al pasar a ser de la realeza: la jaula de oro. Una jaula de oro que cada vez se puede ir haciendo más pequeña debido a la infinidad de protocolos y procedimientos a los que los demás mortales no estamos acostumbrados.

Un poco es el mismo coche en que Diana, Lady Di, un día se estrelló contra un poste. Solo que este coche es silencioso y va en cámara lenta, pero no deja de ser menos letal. Me pregunto: ¿Por qué la autora dejó de escribir en su blog? ¿Se aburrió? Hay mucha gente que se aburre de escribir, o que tiene otras ocupaciones y no puede hacerlo. ¿Pero y si no? ¿Y si ahora todo esto que potencialmente podría estar sintiendo, se lo calla y se va convirtiendo en una bomba de tiempo que tarde o temprano haría implosión?

Mucho se ha dicho de Letizia… que si estaba muy delgada, que si no hubiese sido mejor alguien soltera para el Príncipe Felipe, que si la noruega esto, que si no será muy fría, etc… Y pocos cuestionamientos se hacen desde el otro lado, porque los príncipes y reyes, aún hoy, siguen siendo el sueño casi perfecto. Sin duda, Letizia es una mujer inteligente, y lo suficientemente valiente como para haber aceptado entrar a su jaula de oro por su propia voluntad. Creo que luego de leer esta frase, y con lo que me gusta sentirme libre siento que hay una contradicción entre lo que es la valentía y lo que es la inteligencia en cuanto a la toma de decisiones, pero no podemos olvidar que a veces es precisamente en esos momentos en que hay que ser valientes y tomar decisiones dolorosas, cuando se demuestra que seguimos siendo inteligentes.

Doña Letizia, espero que esté todo bien. Espero que usted esté bien.

0

56. Sweet Escape (Bad girl remix) - Gwen Stefani feat. Juanka Peña

Posted by Juan K Peña on domingo, mayo 03, 2009

The Sweet Scape - Gwen Stefany Ft. Akon
Woohoo, Yeehoo
Woohoo, Yeehoo
Woohoo, Yeehoo

Woohoo, Yeehoo

If I could escape I would but...
First of all, let me say
I must apologize for acting stank and treating you this way
Cause I've been acting like sour milk all on the floor. It's your fault you didn't shut the refrigerator
Maybe that's the reason I've been acting so cold?

Si pudieras dejar todo atrás,
Hacer un borrón y volver a empezar,
Entender que yo valgo más,
Que tus continuas ausencias e intermitentes presencias
Diluyen tu esencia.
También fallé,
pero esto es cosa de dos
llamame para escuchar tu voz.
Deja de pedir perdón,
Para tu frialdad no hay ninguna razón,
Hay tanto calor en mi corazón.

If I could escape and recreate a place that's my own world
and I could be your favourite girl (forever),
Perfectly together
Tell me boy now wouldn't that be sweet? (sweet escape)
If I could be sweet, I know I've been a real bad girl (I'll try to change)
I didn't mean for you to get hurt (whatsoever)
We can make it better, Tell me boy wouldn't that be sweet? (sweet escape)

Si pudieras dejar todo atrás
Vendrías conmigo a un cuento sin final,
Olvidando lo que andaba mal,
Y siendo mi chica especial.
No sería genial?
Dejá de portarte tan mal.
No quiero que cambies más.
Me gustas tal como estás.
¿Por qué no vienes a casa a cenar?
No sería genial?

I want to get away, to our sweet escape
I want to get away, yeah
You held me down, I'm at my lowest boiling point
Come help me out, I need to get me out of this joint
Come on let's bounce, counting on you to turn me around
Instead of clowning around, let's look for some common ground
So baby, times get a little crazy
I've been gettin' a little lazy, waitin' on you to come save me
I can see that you´re angry by the way that you treat me
Hopefully you don´t leave me, wanted you with me

La ayuda está por llegar
¿Me hiciste la batiseñal?
¿Crees que soy tu ‘dark Knight’?
Señorita, se que cuenta conmigo
Y como más que un amigo
Este invierno te necesito de abrigo.
Deja de ser tan vaga,
No me importa lo que hagas,
Mientras no desaparezcas clavándome otra daga,
Me gusta cuando reapareces, mi amor, mi maga.
No estoy enojado,
Eso era en el pasado,
Talvez algo decepcionado
Dame un beso, y todo arreglado.
Vos sabes que soy mejor
que tu ex - enamorado.

If I could escape and recreate a place that's my own world
And I could be your favourite girl (forever),
Perfectly together and tell me boy now wouldn't that be sweet? (sweet escape)
If I could be sweet (sorry boy)
I know I've been a real bad girl (I'll try to change)
I didn't mean for you to get hurt (whatsoever)
We can make it better and tell me boy now wouldn't that be sweet? (sweet escape)

Si pudieras dejar todo atrás
Vendrías conmigo a un cuento sin final,
Olvidando lo que andaba mal,
Y siendo mi chica ideal.
No sería genial?
Dejá de portarte tan mal.
No quiero que cambies más.
Me gustas tal como estás.
¿Por qué no vienes a casa a cenar?
No sería genial?

Woohoo, YeehooWoohoo, Yeehoo (If I could escape)
Woohoo, yeehoo (If I could escape)Woohoo, Yeehoo

Copyright © 2009 KALEIDOSCOPIOS All rights reserved. Theme by Laptop Geek. | Bloggerized by FalconHive.