1

31. A mis amigos... y a los que dejaron de serlo (Por el día del amigo) Julio 20-08

Posted by Juan K Peña on sábado, julio 26, 2008
Hoy viajé en mi memoria, viajé en el tiempo, casi cuatro años atrás. Aún no logro identificar… ¿en qué momento dejé de ser niño? (Talvez aún lo sigo siendo. Who knows? ) Pero, creo que tengo claro en que momento me volví un adulto.

Hace cuatro años decidí dejar mi ‘carrera’ de abogado. Decidí hacer lo que en realidad me apasiona. Quería vivir del fútbol, del deporte… En definitiva, alcanzar lo que Paulo denomina la Leyenda Personal… Convertirme en un preparador físico, como paso previo a realizar mi carrera de entrenador de fútbol profesional.

Posiblemente, para muchas personas ésta fue una de las decisiones más estúpidas que he tomado. Estos pertenecen al grupo de gente que formó, sin mi permiso, con alevosía, premeditación y nocturnidad, expectativas no demasiado grandes, sino diametralmente opuestas a lo que yo soy y a lo que puedo hacer. Pocos pensarán en la brillantez de mi decisión, pero creo que todos coincidirán en que fui valiente.

Me sorprendió el panorama luego de mi decisión. Me sentí completamente solo. Incluso, me sentí solo pese a que unos pocos me palmearon la espalda, felicitándome por el camino tomado. Parecía que la mayoría se empeñase en enviarme de vuelta al mundo del que me había querido escapar.

No pasé hambre, ni frío. Pero viví mucha angustia. No podría describir de otra manera la sensación de ver como mis ahorros desaparecían día a día, y todas las puertas parecían cerrarse.

Pero, sinceramente eso no era lo más desesperante. Poco a poco, mis números iban convirtiéndose en rojos y entre sueños y pesadillas, empecé a encontrarme con mi yo truhán y marginal. ¿A quién mato, a quién robo, a quien ejecuto, a quién me vendo para seguir viviendo y no volver a ese camino que no es el mío? Obvio, nunca maté, robé, ejecuté, ni me vendí…

Sin embargo, lo que más pesar me dio fue que muchas puertas ni siquiera se abrieron para ver que era lo que yo quería. Y yo no quería mucho, porque hay una diferencia grande entre querer y necesitar. Conforme me comía mis ahorros también descubría que tenía más amigos de papel de los que pensaba. La situación del país no estaba para tirar cohetes, pero creo que en circunstancias similares es legítimo esperar que un amigo te tienda una mano, especialmente si sabe que podrías serle útil, con mayor razón. Pero, no fue así.

A ratos uno mira películas tipo la Lista de Schindler, el Pianista, y otras películas sobre el Holocausto. No voy a negar la existencia del Holocausto… Pero es que ¿Sólo se da ayuda en circunstancias más extremas? No podía dar crédito a lo que películas así mostraban. Si yo era el Pianista, seguro que los nazis no me agarraban, ¡Pero me moría de hambre a la semana!

¿Has notado que los tiempos crisis sirven de cernidero? Si uno no sirve, se queda en la red. Si los amigos que uno hizo, no sirven también se quedan ahí, atrapados, y uno, eventualmente, pasa de largo y se encuentra solo. Si sirven, todos pasan. Así de sencillo, así de cruel y despiadado.

En momentos como esos un ‘¿Cómo estás?’ se vuelve una línea aprendida, una frase de cajón, un saludo tan vacío como ‘¡Hola!’, una obligación, porque a tu interlocutor no le importa tu respuesta sino pasar inmediatamente a la siguiente línea.

Si, es verdad, que en momentos uno tiene ganas de contestar. ‘¿Y a vos que putas te importa?’. Sobre todo ante tanta gente que te puede invitar a una boda para arrojarte su opulencia a la cara en los momentos que vos lo estás pasando ‘putas’, o gente que sabes que andan muy bien posicionados en sus empresas, en sus laburos, llenos de viajes around the world y te ven pasar nadando contra corriente y te preguntan ‘¿Vos, como andas?’. En verdad, prefiero a los otros que te ignoran de frente, como si de un día para otro te hubieses vuelto invisible.

‘Tenemos que hacer algo’. ‘Almorcemos mañana’, ‘Dale, yo te llamo’. ‘¿y, ya te casaste?’ Rara vez, no son frases dichas de memoria y no de corazón. Rara vez el entusiasmo invade la boca de quien las pronuncia. Y de repente, ya no hablamos más, pasamos a ser un icono del ‘messenger’ que acaba de iniciar sesión, con quien no nos atrevemos a hablar, a quien no le tenemos, ya, más nada que decir. Pasamos a ser un recuerdo de una tarde, de una anécdota, de un chiste inmediato que se volvieron únicas huellas de alguien que desapareció, probable y posiblemente, por combustión espontánea.

Luego, un día, sin más, te miran y te dicen:

- Has cambiado. Te noto distinto.

Y uno piensa, pero no lo dice, poniendo la voz mental en modalidad problemas de aprendizaje:

- DO-YOU THINK-SOOO?

Y creen que ya no existes más.

¡Pero no! Pienso, luego existo. Te meto un balón en profundidad, luego existo. Me reclaman que les pase el balón, luego existo. Me saludan mientras ceno con una mujer espectacular, luego existo. Ven que el mundo da vueltas y que uno ya no está más mal, luego existo. Estoy triunfando, la tengo más clara que nunca, luego existo. Y entonces, claro, somos ‘amigos’ de nuevo.

¡Pero no! Yo no deprecio una palabra tan linda como es ‘amigo’. Yo, más bien, la aprecio, la valoro, la saboreo y te la digo. Por eso, hoy doy gracias por mis amigos. Ahora, tampoco hay rencor alguno. ¿Cómo se puede aprender a diferenciar la amistad real de la que no lo es, si no? Por eso mismo, no hay bronca, todo bien con ellos.


Por eso, cualquier día puede ser el día del amigo para mí. Pienso en todos ellos, en los que se han perdido en el camino y los que siguen a mi lado. En los que he encontrado en este último año y los que donde quiera que estén siguen pensando en mí, acordándose de mí, de alguna forma.

Pienso en aquellos que trabajan conmigo, que me escuchan y que me leen, que me escriben y me cuentan, que hacen sonar mi teléfono para ver si estoy bien y si se me ofrece algo, pienso en aquellos que contestan mis llamadas y aunque no les vea en ese momento, los siento sonreír.

Gracias por los sacudones que hemos soportado juntos.
Gracias por pensar en mí y repetir mientras yo duermo ‘Hey, yo te cuidaré las espaldas’.
Gracias por ser mis padres, por ser mis hermanos, por ser mis compañeros de trabajo, por ser ‘mis comentaristas’. Gracias por ser mis compañeros en la cancha, y en las batallas que hemos perdido y ganado, y por seguir siéndolo en todas las que se vienen. Yo tampoco les dejaré solos, ni me olvidaré de ustedes, ni les diré frases de memorias, ni ignoraré sus angustias, ni fingiré demencia temporal aunque no sepa que decir.

A ustedes gracias chicos.
A ustedes, chicas, gracias, amores.
Mil gracias.


Ahhhh... Finalmente, como no voy a poner gráfico referente al tema, les dejo uno de 'Cómo confundir a un idiota', para que se rían un poquito.

0

30. Ecos de una boda - Errores no forzados (parte I)

Posted by Juan K Peña on jueves, julio 17, 2008
De vez en cuando, y no es imprescindible que sea luna llena, me sale el entrenador de fútbol que llevo dentro. Entonces, me vuelvo mucho más cuidadoso de cada detalle, de cada paso que doy, de cada palabra que uso, del entorno, de mi gente y de la gente que me enfrenta o se enfrenta a mi gente. En realidad, es fascinante, porque siento que mis sentidos, de cierta forma, se agudizan, y me vuelvo mucho más fino No sé si con más clase, pero mis palabras adquieren una carga positiva que se llama profundidad, y una negativa que podríamos llamarle veneno.

Noche de boda. Se casaba mi prima. Tristemente, es poco lo que puedo hablar de ella, porque apenas la conozco. Había decidido mi vestimenta con suficiente anticipación. Traje negro, camisa blanca, corbata negra y tirantes. Un ‘look’ bastante clásico. Me decidí por un par de zapatos negros de punta cuadrada y el cabello muy corto, tipo Scofield en Prison Break, que es como lo estaba llevando hasta ahora (He decidido dejármelo más largo, nuevamente). En todo caso, lo importante era la impecabilidad y clase de la apariencia.

Me encontré con una amiga de mi hermano, para desproteger su identidad la llamaremos Caro y nos centraremos en algo que, como entrenador, me molesta mucho: los errores no forzados.

Caro se acercó. Sonrío y me saludó.

- ¡Hola! ¿Cómo estás? ¿Viniste en representación de tu hermano?
- ¡Hola! No, yo vengo en representación propia. ¿Sugieres que solo estoy aquí porque mi hermano no está?
- ¡Jaja, nooo! Quería decir también en representación de tu hermano… Bueno, estoy por allá. Asómate más tarde
.

Error 1:

- Caro, vamos a bailar.
- No, es que voy a bailar con mi amiga. Pero te juro que luego te saco a bailar yo. Antes que acabe la noche, te saco a bailar.


No soy la última coca-cola del desierto, ni la última birra del estadio, pero creo que no todos los días se te acerca un tipo de presencia impecable, por más boda que sea. Las oportunidades que no se aprovechan, no se pierden. Las termina aprovechando otra persona.

Error 2

- Ok… No te preocupes! Todo bien!
- Te juro que yo te saco a bailar más después.

El 90% de las mujeres se queja del 99,9% de los hombres y su incapacidad de cumplir promesas. ¿Cómo pueden quejarse tantas mujeres de esto? Me refiero a que es muy fácil ver la paja en el ojo ajeno. Seas hombre o mujer, si te llenas la boca de promesas que no vas a cumplir o no puedes cumplir terminas diciendo un ‘chorro de babas’ (Me encanta esta expresión colombiana). Esto, solamente te deja como una persona vulgar. Creo que no hay nada peor que ser vulgar.

Error 3

Mientras Caro bailaba con su amiga, vi que mi tia estaba sentada sola. Siendo la nueva ‘suegra’ pensé que era bueno bailar con ella. No habían pasado dos canciones cuando Caro fue a ‘buscarme’ y viéndome ocupado soltó:

- ¿Ves? ¡Vengo a buscarte y te encuentro bailando!

Vale, como chiste buenísimo. 10 puntos. ¿Y cuanto pasó? ¿Dos canciones? Si pretendes que haces algo, pero no lo haces me voy a dar cuenta fácilmente. No nací ayer. Cuando vos ibas, yo ya regresaba dos veces.

Error 4

No contenta, dejó la pista de baile y fue rumbo a la mesa de mi familia y habló con mis viejos. Al sentarme en la mesa mis viejos me comentaron, cada uno y por separado, que Caro me andaba buscando.

- Vine a mostrarte tarjeta amarilla, Caro.
- ¿Por qué?
- A mí no me consigues a través de mis papás…


Si bien era una broma, encerraba una verdad indiscutible. Entiendo que ella pudiera estar acostumbrada a lidiar con niñitos de 25 o 35 años, y no con hombres de 30. Pero yo no tengo que pedir permiso a nadie, me mando solo, soy libre, independiente y autónomo. Va a sonar cursi, pero la distancia más corta entre dos personas es la línea recta, la verdad, y el único atajo que conozco la sonrisa.

Error 5

El baile se interrumpió para dar paso a los jueguitos propios de las bodas. El ritual un tanto tribal de los casorios en el que solteros y solteras participan, la música reinició. ¿Dijo que me iba a sacar a bailar, no? Sonaba de fondo The Love Generation de Bob Sinclair. Caro se acercó a mí.

- Chau! Me voy. Quedó pendiente para otra vez.
- Quedo pendiente para otra vez. Chau.


Repetí casi lo mismo pero al revés, sin la menor convicción.
No esperes segundas oportunidades, si desperdicias las pocas que tienes.

No pretendía, ni esperaba que nada pase en un posible baile. Simplemente, no entiendo ese comportamiento de alguien con quien no tengo absolutamente nada y que veré una vez al año exagerando. Hay muchas quejas sobre los errores no forzados de los hombres. ¿Qué me dicen de los errores no forzados femeninos? ¿No terminan siendo ‘forzadísimos’?


*En otra oportunidad analizaremos otros errores, tanto propios como ajenos. Lo importante es reirnos y aprender, no?

0

Interludio - Mis parecidos... razonables?

Posted by Juan K Peña on miércoles, julio 16, 2008
Mucha gente debe conocer la página de My Heritage. Esta página brinda opciones interesantes, como la de realizar un collage, partiendo de una fotografía. El collage establece parecidos razonables entre la imagen del usuario y ocho personajes famosos. Muchas veces los parecidos no son tan acertados, otras veces las comparaciones son obvias o divertidas. Así alguien podría tener la quijada de Brad Pitt, los ojos de Bono, las orejas de Sofía Vergara… ¿qué se yo? Son varias posibilidades, y distintos los parámetros para establecer los parecidos.

Mis parecidos más destacados incluyeron:

Josh Duhamel (El retrato de Dorian Gray, 1999 y Transformers, 2007). Este actor es el actual novio de la cantante Fergie. Curiosamente, Josh actúa en Las Vegas, una de mis series favoritas, en el papel de Danny McCoy. Un personaje con el cual me identifico.


Michael Vartan (Nunca me han besado, 1999)

Ashton Kuthcher ( Dude, where is my car? , 2000; Recién casados, 2003; The butterfly effect, 2004; A lot like love, 2005) Asthon fue conocido por el personaje de Michael Kelso en That 70’s show, conductor de Punk’d de MTv, y por ser novio de la bella Demi Moore.

Patrick Stewart, este actor es muy conocido por ser el Capitán Jean-Luc Pickard en Star Trek o por ser el profesor Charles Xavier en las trilogía de X-Men.

Hubo otras opciones que varían entre: John F. Kennedy Jr., Usher, Denzel Washington, Julio Iglesias, Richard Gere, Brendan Fraser, Clive Owen… O mujeres!!! Si, sucede que algún parecido tiene mi rostro con los de Keira Knigthley, Jessica Simpson, Valeria Mazza, Norah Jones o Denisse Richards.

Vale la pena aclarar que no realicé ninguna comparación con fotos recientes. Prometo hacerlo más adelante, si hay algún lector o lectora con curiosidad. También vale la pena decir e insistir que los parecidos son razonables, pero no necesariamente significa que son exactos. Esta página no deja de ser una opción divertida de pasar el tiempo.

Creo que hay actores a los que puedo parecérmeles más como son el mismo Benjamin Bratt, que actúa en películas como Cat Woman, Miss Congeniality, E-Ring, Law & Order, entre otras. También creo que podría pasar como un 'Craig David' latino. Y algunos amigos españoles han dicho que me parezco al Pipita Higuaín, pero en versión morocha. O sea, como 'mejorado', como 'reloaded'.

Citando a una famosa, cerramos esta entrada: 'Lo dejo a tu criterio'.

0

29. Acusaciones particulares, demasiado generales.

Posted by Juan K Peña on domingo, julio 06, 2008
Me acusaste:

De desordenado y de estructurado, de caótico, de irreverente, de inconsecuente, de atrevido, de poco serio pero circunspecto, de distraído pero enfocado, de descuidado pero demasiado precavido, de superficialmente profundo…, de profundamente superficial.


De egoísta, de muy lento pero atolondrado, en definitiva de no ir a la velocidad adecuada jamás, mejor dicho de no ir a la velocidad que se te antoja…

De inestable, de voluble, de variable, de demente, de agresivo, pero pasivo, siempre hiperactivo…pero aburrido.

De soñador, de demasiado optimista, de idealista, de poco real, de creer en magia, de realizar trucos sencillos, pero que no terminas de comprender…

De etéreo, de impalpable, de ser tan irreal que parezco falso, no mentiroso, sino falso, como un holograma que existe, pero sigue impalpable, de imaginario, de fantástico, de ideal, de espectro, de caprichoso, de mágico, de utópico y de vivir de ilusiones.

De ansioso, de desmemoriado, de rebelde con causa… y también sin causa, de demasiado valiente para tu gusto, de demasiado cobarde como para ir a tus guerras, de pelear por causas que termino ganando aunque las consideres perdidas, de no querer dejar las cosas que amo por ir a pelear en tus cruzadas.

De romper tus moldes y salirme de tus esquemas, de no creer en cadenas ni encadenamientos, ni en lazos de sangre más fuertes que los vínculos de amor. De ignorar que la sangre existe, pero soñar en la existencia de un amor que aún no percibo…

De ser demasiado leal, de no querer lavar tus culpas y miserias con traiciones y mentiras, de no dar pasos en falso, de elevarme por los cielos cuando me esperabas arrastrándome en la tierra, de volar y sobretodo de volar.

De egoísta, de engreído, de egocéntrico, de creer que vivo en el ombligo del mundo, aunque de momento sea verdad. De ser incapaz de ser tu segundo, de traicionar tus sueños, de no merecer un oscar como tu mejor actor secundario, de buscar el protagonismo en mi propia vida.

De plagiador de sueños ajenos, de desear más de una vez a la mujer maltratada del prójimo, de desear más de dos veces a la mujer que bien trata al prójimo, de querer matar al prójimo maltratador con una quijada de burro, y de esperar agazapado la caída del prójimo bien tratado. En definitiva, de ave de rapiña, de envidioso, de celoso de lo ajeno y de descuidado de lo propio, aunque no me quede nada…

De respirar y disfrutar aires de grandeza y aroma de belleza, de decir verdades que te obligan a callarme lanzándome la puerta. De ignorar las medias verdades que me dijiste alguna media noche, a messa di voce. De no decir mentiras para cubrir tus verdades. En definitiva, de mala comunicación, me acusaste.

De no aguantarme los puñales en la espalda, de ponerle el pecho a las balas que no eran para mí, de otorgar cuando callo, de no hacer leña del árbol caído, de poner las manos en el fuego por las personas en quienes creo, de poner los puntos sobre todas tus ies, y a veces sobre tus jotas, de no quemarme al jugar con tu fuego, de tropezar una y otra vez con la misma piedra que escondes siempre en lugares distintos, de disfrutar más de los cien pájaros volando que del uno que mataste y lo dejaste en mis manos.

De traición a tu patria, de apropiación indebida de sensaciones que no me merecía, de desacato, de no saber cuando es basta, de no saber callarme, de no saber hablar a tiempo, de no saber reclamar, de quejarme demasiado, de actuar con alevosía, premeditación y nocturnidad.

De carecer de un cerebro calibrado según tus gustos, de tener manos de mantequilla, de tener pulmones de tísico, de tener mala voz, de tener rodillas de cristal, un carbón por corazón, y dos pies izquierdos a la hora de bailar.

De niño inseguro, de macho alfa, de ubersexual, de engreído, de niñito de mamá, de machista, de robacunas, de niño bien, de niño mal, de niño fatal, de niño, en definitiva.

De no ir de frente, aunque vos nunca fuiste, y solo te fuiste.

De vago, de irresponsable, de verde canalla, de negro futuro, de invisible pasado, de presente a cuadros, y de futuro incierto.

De acostarme muy tarde, de despertarme muy temprano, de dormir poco y de soñar mucho.

De no respetar a Nacho, de reírme de Pablo, de menospreciar a Martín y de ignorar a Daniel y de no creerle ni un cinco a él.

De pobre, de callado, de tímido, de social, de introvertido, de libre pensador, de carente de estilo, de derrochador, de ahorrador, de avaro, de previsivo,de calculador, de salvaje, de incansable e insaciable.

De contagioso, de repelente, de insano, de arisco, de complejo, de ser un mal enfermo, de ser un mal paciente y de ser impaciente.

De exiliarme en las ciudades que amo, de vivir del pasado, de creer en promesas ajenas aunque fuesen las tuyas.

De desconocer tus estadísticas y tu filmografía, de perderme tus telenovelas, de no entender tus dramas, de no reírme de tus comedias, de no llorar con tus tragedias…

De traducir mal ‘i love you’, de cargarle de demasiado significado, de condimentar el sentimiento, de no ser capaz de repetirlo de memoria, de decirlo muy tarde, o muy pronto… de no sentirlo y mejor dicho, por no decirlo.

De salir poco, de trabajar mucho, de no tener oficio ni beneficio, de no tener horario, ni fecha en el calendario,

De vivir en fuera de juego, de no ir bien por alto, de no pasar rápido el balón, de chupón, de no manejar el balón con la zurda, de falto de picardía, de no saber salir bien, de parar mal la barrera, de achicar mal, de usar demasiado el rombo en el mediocampo, de romántico por jugar con wings, de obseso por jugar con enganche.

De creer en un Dios pero no ir a visitarlo lo suficiente, de romper todas las promesas que nunca hice, de traidor de los sueños ajenos…

De payaso, de domador de fieras, de malabarista, de caminar por la cuerda floja solo cuando nadie me ve.

De ser un mal escritor, de dejar a medias lo que leo, de empezar lo que no quiero acabar… ¿acaso no todos lo hacen? ¿Empezar algo que no queremos acabar? Así pienso que es la vida, así pienso que debe ser el amor… querer empezarlo, empezarlo y no querer acabarlo…jamás.

De no creer en tu socialismo, de evolucionario y no revolucionario, de demócrata, de alienado y alineado, de espía, de creer en reyes y las leyes, de creer en princesas y de crear princesas, de creer en hadas siendo un niño y de no creer en vos siendo un hombre.

De pasar noches en vela por tonterías, de ser un estorbo en tu camino, de ser el lastre de tu globo, de tangente, de accesorio, de accidental, y de siendo accidental volverme fatal.

De culé, de albiceleste, aunque me cueste. De amante del fútbol lírico, de basilista, valdanista y mourinhista.

De llamarte ‘sweetheart’ porque se me olvidó tu nombre, de olvidar las palabras que no te dije, de querer olvidar lo que me forzaste a decir, de eliminar lo que una vez te escribí para poder volver a crearlo para ella, sin hacer trampas. De escucharte y pedirte que me hables, que te expreses, que me cuentes tus cosas... aunque tú creas que no tienes nada que decir.

De latino, de ilegal, de sudaca, de clandestino, de indocumentado, de apátrida y de paria, de refugiado sin refugio, de errante, de gitanito y de nómada, de vagabundo, de adorador de becerros de oro y potras de carne y hueso.

De bebedor de botellas que nunca vacío, de enviar mensajes en ellas para que alguien me rescate del naufragio en tu isla.

De tener dos amigos, de tener veinte enemigos, de impío y de hereje, de ludópata, de apostarle al amor, de jugarme la vida, de dejarme ganar y cagarme de risa.

De constructor de castillos de arena, barquitos y cisnes de papel.

De guerrillero, de rebelde, de kamikaze, de disparar con palabras, de azotar con la lengua, de eliminar con la mirada

De delincuente común, de matón, de gangster, de terro-pacifista, de metiche, de temerario…

De irme sin avisar, de quedarme cuando no debo, de irme cuando se me requiere, de no estar cuando me buscan, de aparecer cuando no me llaman.,

Yo…
Confieso ser orgullosamente culpable de la mitad de tus acusaciones,
Me declaro inocente de la otra mitad y dejó en tus manos la imposible y pesada carga de la prueba.

Pero, sobre todo, y a riesgo de fastidiarte más

yo, te perdono
.

0

Recordati Di Me (Drama - 2003)

Posted by Juan K Peña on domingo, julio 06, 2008
Creo que me voy a dar el gusto de recomendar películas en este espacio, es algo que siempre he querido hacer y podré compartir con aquellas personas que me leen mi gusto por el cine.
Recordati Di Me(2003), una película de Gabrielle Muccino, nos narra la historia de una familia de clase media italiana con problemas de disfuncionalidad. Carlo Ristuccia (Fabrizio Bentivoglio) y Giulia (Laura Morante) se enfrentan a una crisis matrimonial en la que el distanciamiento es evidente. Sus hijos, Valentina (Nicoletta Romanof) y Paolo (Silvio Muccino) se enfrentan a los desenfrenos, curiosidades y dramas propias de la vida adolescente. Cada uno de los personajes se ve abrumado por sus propios problemas y su ensimismamiento les aleja del resto de la familia. La aparición de Alessia (la siempre hermosa Monica Bellucci), novia de la juventud de Carlo, es un elemento detonante en el transcurso de la historia.

Recordati di me llamó la atención porque la aparición de Alessia implica un despertar en la vida de Carlo, que había caído en la monotonía, debido a la falta de pasión.

Creo que los diálogos en algunos segmentos alcanzan una brillantez poética. También me gustó lo que podría definirse como una lucha entre lo que damos y recibimos, lo que queremos y lo que necesitamos, y también la búsqueda de la valentía para dejar la conversación a un lado y decidirse por la difícil que es embarcarse en la búsqueda de los sueños, ‘allá afuera’, donde la seguridad de lo conocido desaparece.

Creo que también pensé en mi familia y en el concepto de las ‘familias unidas’, que no son tan reales. Creo que tengo suerte con la mía, pese a que no aparentamos la misma unidad que las familias promedio, creo que tenemos suerte de contar con nosotros y entre nosotros. También se puede apreciar los sutiles límites entre los espacios ‘familiares’ y los ‘personales’. Creo que la búsqueda de la felicidad es un derecho que nos está garantizado a todo ser vivo, y que en espacios de libertad, somos capaces de vivir a plenitud. Así mismo, somos, en esas circunstancias, lo único que nos puede frenar.

Pese a los intentos de cada uno por alcanzar vidas más plenas, los Ristuccia parecen cometer los mismos errores, porque muchas veces cuesta arriesgar lo que tenemos por seguro si vamos en búsqueda de lo que queremos en realidad. La banda sonora de la película es también muy recomendable.Esta peli recibe un sólido 8,5 en mi escala de favoritas.

Copyright © 2009 KALEIDOSCOPIOS All rights reserved. Theme by Laptop Geek. | Bloggerized by FalconHive.