74. El Ocaso de Crepúsculo o el mal ejemplo del vampiro Edward Cullen
¿Qué le ven a Edward Cullen? ¿Qué-le-ven? Más allá de que el actor sea un post-adolescente atractivo, lo cual hoy en día no es mayor ventaja en el mundo, dado que se pueden mencionar chicos que podrían lucir mejor que él… por ejemplo, Cristiano Ronaldo, Pablo Martinez ( Casi Angeles), Victorio D’Alessandro ( Casi Angeles), o el mismo Juan Pedro Lanzani ( Casi Angeles). No es una defensa de los chicos de la serie de Cris Morena, solo que son los que estaban más al alcance y sirven como ejemplo de lo que se hace mejor que en Crepúsculo ... Lo que yo me temía era encontrarme detrás del chico Cullen una especie de Harry Potter ‘Reloaded’. Con esto, no me estoy refiriendo al tibio papel que el chico desarrolló en una de las secuelas de las películas de Harry Potter, si no me refiero a que se caiga en el cliché del adolescente misterioso, taciturno, con súper poderes y que debe enfrentar al mal. Lo que no está mal como una especie de ‘anti-héroe’, ya que ya no es el capitán del equipo de fútbol americano, ni el chico con la banda de rock, ni el chico malo que vuelve locas a las chicas el que se lleva el protagónico, sino un chico que aparte de ser atractivo y llevar el cabello al estilo que impuso Gokú (ver Dragon Ball Z), no tiene mayor cosa que ofrecer a una mujer. Mejor dicho, tiene muy poco que ofrecer a una adolescente… no se diga a una mujer.
No deja de ser curioso el hecho que la mayoría de vampiros en Crepúsculo sean adolescentes, se entiende que la novela fue dirigida a un público adolescente, que aparentemente no cuestiona mucho de lo que le ofrecen. Al menos, no lo hacen con Cullen y compañía. Es decir que quienes transformaron a los jóvenes en vampiros, se dedicaron a morder jóvenes… Lo que ya da una idea de perversión. No olvidemos que pese a ser seres que conservan su apariencia física, tienen cientos de años… Pero por qué transformar solamente a jóvenes adolescentes y post-adolescentes? Que pasa con los jóvenes adultos? Si usted fuese vampiro o vampiresa… a quien mordería para comer o para pasar la eternidad? En ese caso, mi top-6 estaría formado por: Violeta Lo Re, Amaia Salamanca, Cherryl Tweedy, Norelys Rodríguez, Aylar Lie e Izabel Goulart. Eso por belleza, ahora si fuera por buscar alguien interesante con quien pasar la ETERNIDAD…. No sé, la búsqueda se complicaría alguna bella estudiante en sus últimos años universitarios… ¿¿¿Quien va a querer un adolescente para pasar la eternidad??? La idea es enfermiza por si sola. Partamos del hecho que la adolescencia es una etapa de sufrimiento, de ahí el verbo adolecer… ¿Nadie quiere un sufrimiento eterno, no? Y si ser vampiro ya implica un sufrimiento, no lo arruinemos más añadiéndole la adolescencia… Llueve sobre mojado. Si, muy loable, salvarles la vida a unos adolescentes a punto de morir, condenándolos a una vida de beber sangre, y más en estos días con el problema del SIDA y otras enfermedades que se portan en la sangre y además de eso, una vida de ¿dolor? ¿de soledad insufrible?
Lo preocupante es que el fenómeno de Edward Cullen ( Y no le estoy llamando fenómeno al chico, por favor!) ha despertado una ilusa ensoñación en mujeres hechas y derechas, en mujeres realmente admirables, interesantísimas, educadas, inteligentes y muy bellas. Un poco comprendo la fascinación en las adolescentes, que tienden a magnificar todo lo bueno y todo lo malo. ¿Pero qué pasa en torno a este vampirito que ‘vende’ tanto? Es que no se puede decir que convence, sino que ‘vende’…
Al inicio de la película el chico se presenta como un ‘preppy’, un cheto que no se relaciona sino con su familia. Es decir, que había razones de sobra para que todo el colegió lo detestase por más lindo que fuese, cosa que pasa en cualquier colegio del mundo de aquí a la China y de la China a la Patagonia. Llega Bella al pueblo y al colegio y se encuentra con que el mejor partido de la escuela, aparte de Cullen, es el chico negro, el cual casi la arrolla con su auto, lo que aprovecha Cullen para (oh, sorpresa!) salvar a la chica. Aparte de ese chico, na-die en la escuela está a la altura de jugarse el papel protagónico con Cullen. Porque, por supuesto, el otro que podía jugarse el protagónico (que lo hará más tarde en la secuela de Crepúsculo) es el joven indio, pero claro, el NO VA A LA ESCUELA, porque pertenece a una minoría ALTAMENTE SEGREGADA en los Estados Unidos. ¡Obvio, como se iba a cuadrar Bella, adolescente hermosa (pero que parece influenciada por el grunge en su forma de vestirse y peinarse) e inteligente con un segregado si podía estar con el chico más poderoso (social y económicamente hablando) del lugar!
Alguna de las adolescentes que ha visto la película, si se pone en el lugar de Bella… ¿con quién se iba a poner de novia? Con un chico lindo, y seguro de sí mismo, pero pobre y perteneciente a una minoría segregada o con el lindo, rico, el dueño del lugar, perteneciente al círculo social más alto del pueblo?
Edward Cullen se muestra durante toda la película Crepúsculo como un adolescente inseguro, manipulador, dramático, y de una alta inestabilidad emocional, elementos que provocan un cocktail poco recomendable en cualquier hombre, mucho más en un adolescente. Me extraña que no tuviera espinillas, aunque las mismas brillasen como rubíes al contacto con el sol.
Al principio, él se muestra muy solitario y su mirada hacia ella denota atracción, desprecio, desinterés, mínimas dosis de seguridad, máximas de inseguridad, y una variabilidad inusual en cualquier persona. La busca, deja de buscarla, le dice que se aleje… Es decir, ahí se entiende el HISTERIQUEO que toda mujer dice odiar, pero que la termina atrayendo. Solo que esta vez cuenta con la publicidad de millones de mujeres que auspician ese comportamiento, del cual más tarde, en la vida real, lamentarán.
Cullen fue mordido por ‘su padre adoptivo’, con el fin de salvarle la vida en 1918... Alrededor de la primera guerra mundial, digamos… Es decir que aunque físicamente tiene 17 años, en realidad tiene un poco más de 100 años. Sin embargo, la interacción con Bella es propia de un chico de entre 15 y 17 años. Lo que no se entiende… ¿Qué hizo durante los 72 años entre ser mordido y conocer a Bella? ¿Pasó en coma para seguir portándose como si no hubiera vivido lo suficiente para haber aprendido ‘algo’ sobre mujeres? ¿Se dedicó a chuparle la sangre a todas las mujeres a las que se acercaba, hasta matarlas y luego que…. Masturbación compulsiva con la fuerza de un vampiro? Las novelas cuentan que se dedicó a matar a criminales, pero queda poco sustentando que más hace de su vida...No sé, de alguna forma debe explicarse que no sepa manejarse ni medianamente bien con la flaca, que desde el principio se nota que le tiene ganas pese a todas las estupideces que se manda Cullen?
Comencemos con las estupideces:
1. NO PUEDE LEERLA. Creo que la chica, en la película, tiene un lenguaje corporal exageradamente notorio como para que él, un tipo acostumbrado a leer mentes, ‘no pueda leerla’. No le presta atención a ningún otro chico, le invita al paseo con los amigos, pasa buscándolo, dilata las pupilas al hablar con él, lo busca con la mirada todo el tiempo, ¿Qué otras señales buscaba Cullen? ¿Sudoración, sequedad de los labios, jugueteo con el cabello, tal vez que vista más sexy para él, que lo invite a salir?
5. En la película, Bella queda expuesta a una violación por un grupo de pandilleros. En ese momento aparece Cullen en su auto, cual Fernando Alonso, los asusta y luego se enfrenta verbalmente a ellos y rescata a la chica. Hasta ahí todo perfecto, pero luego de esto, el flaco pierde totalmente el control… Empieza a manejar muy nervioso, a exceso de velocidad, al punto que es Bella, que casi fue violada segundos atrás, quien tiene que tranquilizarlo. ¿No se supondría que en ese caso, lo más importante era lo que Bella sentía y estaba pensando? ¿No era mejor conducir tranquilamente hasta un lugar donde ella se sintiese segura y tranquilizarla? ¿Talvez llevarla a su casa? Pero no, el egoísmo de Edward, talvez propio de los vampiros hace que la escena gire en torno a él. Nuevamente, una actitud propia de los adolescentes que anteponen el yo.
Se puede seguir enumerando los errores en los que cae la autora, al crear un personaje tan débil, incoherente y contradictorio. Personalmente, creo que hay historias de amor mucho más bonitas que pueden incurrir en la cursilería, pero que están mucho mejor elaboradas como son The Notebook, o si se prefiere romance de adolescentes hasta la tragedia de Romeo y Julieta en versión clásica. La crítica viene porque se le ha dado demasiado peso a una película que deja mucho que desear, sobre un texto que pudo haber sido mejor elaborado y que daba para mucho más. No es que no entiendo el romance que ‘intenta’ brindar Twilight- Crepúsculo, solo que las falencias son demasiado grandes y resaltan a la vista y el modelo que se pretende mostrar de un ‘príncipe azul’ es tan deficiente como los modelos anteriores presentados por Disney o Barbie y que tanto daño les han hecho a las mujeres. Es un modelo, que en la vida real, se dirige solamente al fracaso.